El cronista deportivo, miembro del Salón de la Fama del Beisbol desde 2003, habla de la relevancia de los Saraperos de Saltillo para la Liga Mexicana y sobre las mejores épocas de la Nave Verde.
Enrique Kerlegand, uno de los cronistas deportivos más importantes del país, considera que la llegada de Saltillo a la Liga Mexicana de Beisbol fue muy bien recibida y que los Saraperos son un equipo con mucha tradición.
Entrevistado por el periodista Carlos R. Verástegui en el libro conmemorativo “Saraperos: Los primeros 50 años de una gran historia”, Kerlegand cuenta que Tomás Herrera fue parte esencial en la llegada de Saltillo a LMB.
“Nacen en el 70, pero se empezó a vivir desde el 69, que fue el último año de Tomás Herrera como mánager del México, y él influyó mucho. Aquí había un grupo de directivos, gente interesada, pero faltaba el aval de Liga Mexicana y Tomás los ayudó mucho en eso”, explica Kerlegand, miembro del Salón de la Fama del Beisbol desde 2003.
El periodista destaca dos grandes épocas doradas del equipo saltillense: los años 70 y 2009-2010, cuando se dio el tan anhelado Bicampeonato.
“En el Distrito Federal se escribía mucho de los Saraperos (en 1970) y sus grandes peloteros; muchos de ellos grandes bateadores como Marcelo Juárez, grandes jugadores como Lupe Chávez… un elenco bastante confiable con gran pitcheo como Felipe Leal, también estuvo gente como Andrés Ayón en ese año del 71”.
Sobre el Bicampeonato, añade que los Saraperos jugaron muy bien las Series Finales, a pesar de no tener las mejores campañas en playoffs ni en la temporada regular.
“No fueron años de gran presencia como otros, sin embargo, en la Serie Final pudieron imponerse a sus rivales logrando el campeonato y el bicampeonato”.
En la publicación conmemorativa, realizada por Saraperos y el periódico Vanguardia, el cronista también habla sobre lo que significa Saraperos para el beisbol mexicano. “Es un logro fantástico, porque si partimos de la base, de la consistencia, que es algo que no tienen la mayoría de los equipos, Saltillo es el cuarto pilar de la Liga Mexicana. Sultanes nace en el 39 y se queda para siempre; México nace en el 40 y se queda para siempre; Tigres nace en el 55 y se queda para siempre, aunque con un asterisco porque nació en la capital, después se fue a Puebla y ahora está en Quintana Roo. Ellos son los otros tres pilares”.
